alert text
noviembre 14, 2017
Boletines, Resiliencia - Mindfulness y más allá,
one comment
Este fin de semana hemos celebrado mi 60 cumpleaños. Toda la familia volvió a casa y tuvimos un fin de semana de celebración; cuentos, juegos, comidas compartidas, risas, abrazos, lágrimas, “discursos”, los nietos. En una palabra: ¡maravilloso!
Al llegar a los 60 años es costumbre permitirnos mirar hacia atrás y repasar nuestra vida. Al hacerlo, el sentimiento que predomina es el agradecimiento que siento profundamente.
Hace treinta años nunca hubiera imaginado que sería tan afortunado en tantos aspectos de mi vida. Acababa de empezar un camino hacia la auto-realización y todavía tenía un dolor profundo y confusión en cuanto a mí mismo – “auto-medicandome” con lo que tenía disponible – principalmente el alcohol.
Acepté que probablemente moriría antes de cumplir 60 años (mi padre falleció con 53 años – consumo de alcohol y tabaco – los principales culpables). Fui incapaz de mantener relaciones personales sanas, con sentido y estaba bastante familiarizado con pensamientos suicidas.
Mi vida ahora no podría ser más diferente; contiene mucho más de lo que había esperado jamás pero en maneras que nunca hubiera imaginado. Así que arriesgándome a aburriros a todos, pido indulgencia mientras que un hombre mayor comparte algo de su sabiduría adquirida:
Lo que acabo de enumerar es en realidad, una manera de vivir, una manera de cuidarte a ti mismo.
Es una especie de “egoísmo iluminado”. Una vida feliz para mí significa paz en mi corazón y espacio en mi mente; también salud física.
Surge de la percepción y la actitud. Siempre intenta abordar la vida con curiosidad abierta, autocompasión y humor.
La felicidad para mí es la habilidad de cuidarme de mí mismo (sin obsesionarme) lo que significa que puedo estar plenamente presente para otros – tanto en mi vida profesional como en mi vida privada.
La vida, verdaderamente, tiene que ver con el viaje y no con el destino. Tenemos mucho menos control sobre nuestras vidas del que imaginamos.
Si confiamos en el proceso de la vida, entonces adoptamos la actitud del hortelano que entiende que su trabajo simplemente consiste en cuidar la huerta; crear las mejores condiciones para que las plantas prosperen y den fruto.
No puede controlar el tiempo que necesitan para crecer y no puede controlar las condiciones meteorológicas; sólo puede crear las condiciones más favorables.
Las actividades y actitudes que he enumerado en realidad no son más que “cuidar la huerta”, creando las mejores condiciones para la conexión, la ecuanimidad y la felicidad.
Si quieres más ideas, consejos o ayuda para mejorar tu vida y reducir el estrés y la ansiedad puedes ver nuestro programa de resiliencia para mejorar tu capacidad para salir reforzado de experiencias difíciles y de salir fortalecidos, tras pasar por una experiencia traumática o un periodo de ansiedad.
Ver programa de resiliencia y mindfulness
Te deseo paz en tu corazón, salud y felicidad.
</> with <3 by Latte
Comentarios de la comunidad
VASILE
Le felicito de todo mi corazon por su sinceridad Sr. GEOFFREY! y muchos,muchisimos años felices en compañia de sus seres queridos! Me ha gustado mucho la expresion :"materialismo espiritual" :saber mucho y no hacer nada es pura vanidad!