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La ola solitaria

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Geoffrey Molloy

Todos somos como una ola, no estamos más separados del universo de lo que la ola está separada del mar.

enero 31, 2023

BoletinesResiliencia - Mindfulness y más allá

4 comments

El viento, las mareas, la luna, el sol, habían creado las condiciones ideales; así que del mar surgió una ola. Para el poderoso océano infinito, tan profundo y tranquilo, la ola era simplemente una manifestación de su amor, del anhelo de la vida por sí misma.

Mientras la nueva ola viajaba por el inmenso océano, se sintió feliz. Se maravilló con el sonido del canto de las ballenas; sintió placer con el suave calentamiento del sol; sintió el frescor del viento.

Aunque la ola formaba parte del mar, no podía evitar verse a sí misma como algo diferente, separada del mar. «Soy una ola maravillosa, soy diferente, estoy separada» pensó, pero en el mismo momento en que pensaba estas cosas sintió miedo por primera vez: «Soy pequeña, estoy sola, soy vulnerable, moriré».

Y así continuó su viaje, avanzando sin cesar por la superficie del profundo, tranquilo y amoroso océano.

La orilla estaba cada vez más cerca. Temblaba al saber que pronto se estrellaría contra las rocas y esa sería su muerte, su fin. Se sentía aterrorizada, sola.

Ahora había llegado el momento inevitable, el momento que temía desde hacía tanto tiempo; la ola se estrelló contra la roca en una estruendosa explosión de “salpicadura” y espuma. Su miedo era insoportable, pero a medida que se disolvía también lo hacía su ilusión de separación. Al verse envuelta en el amoroso abrazo del mar, se dio cuenta de que volvía al mar. En ese instante supo que nunca había sido otra cosa que una parte del profundo, amoroso e infinito océano. Nunca estuvo separada; simplemente era una manifestación del amor, del anhelo de la vida por sí misma. 

Mientras el mar la envolvía, se sintió simultáneamente más grande y más pequeña, llena de asombro. Sabía que por fin había vuelto a casa, a su verdadero estado de amor.

Todos somos como esa ola, sufriendo la persistente ilusión de la separación. En realidad, no estamos más separados del universo de lo que la ola está separada del mar. Nuestra ignorancia de esta realidad es la raíz de todo nuestro sufrimiento.

Somos simplemente una manifestación consciente del Universo; surgimos cuando se dan las condiciones adecuadas, cuando nos liberamos de la ilusión de separación del ego y nos liberamos del miedo, del aferramiento y de la aversión. En ese momento descubrimos que nuestro estado natural es el amor.

Si practicamos y tenemos suerte, experimentaremos momentos de conexión sin ego con todo; en ese momento sabemos que no estamos separados; sabemos que la separación sería sencillamente imposible.

Comentarios de la comunidad

Dioni González Aranda

Muchas gracias Geoffrey, por esta reflexión q me recuerda y me ubica a en el lugar donde pertenezco. Muchas gracias por compartir tu sabiduría conmigo y con tantas personas q queremos seguir el sendero q nos lleva al camino del cambio. Siempre te estoy agradecida. Dioni

Mar

Gracias una vez más Geoffrey!! , por tus palabras sabias que re hacen pensar , en tus lecturas dejas esa parte del ser humano en la que nos escondemos.

AGUSTIN DA COSTA

Gracias maestro por compartir estas reflexiones tan bellas. Gracias Geoffrey

Vanesa

Espectacular!! Con estas palabras me he sentido de nuevo parte del todo... gracias una vez mas Geoffrey!!

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