Geoffrey Molloy
La humildad no significa pensar menos en ti haciéndote de menos, sino pasar menos tiempo pensando en ti. ¿Cómo puedo desarrollarlo?
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Geoffrey Molloy
La humildad no significa pensar menos en ti haciéndote de menos, sino pasar menos tiempo pensando en ti. ¿Cómo puedo desarrollarlo?
octubre 25, 2022
Boletines, Resiliencia - Mindfulness y más allá,
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La humildad no está realmente de moda. Dudo que lo haya estado nunca.
La humildad no significa pensar menos en ti haciéndote de menos, sino pasar menos tiempo pensando en ti.
La humildad no es lo mismo que la baja autoestima; la baja autoestima es un problema del ego tanto como la arrogancia. Tampoco significa tener falsa modestia.
El budismo considera la humildad como una virtud. En algunas escuelas de pensamiento budista se considera un precepto.
En la psicología moderna se puede decir que la humildad tiene las siguientes características:
La humildad equilibrada con el ego es vital para cualquier buen líder. La humildad nos permite aprender; nos permite ser creativos; aceptar la crítica constructiva. Nos ayuda a construir y profundizar nuestra relación con los demás. Nos mantiene con los pies en la tierra. Según mi experiencia, las personas a las que más les cuesta cambiar son las que tienen grandes dificultades con la humildad. No es una sorpresa que muchas de estas mismas personas también tienen dificultades con la paciencia.
En nuestra sociedad el ego es el rey. Mientras que la humildad es muy malinterpretada, se considera un tipo de debilidad. Sin embargo, es todo lo contrario: es una de las actitudes más potentes y efectivas ante la vida. Los estudios demuestran que predice mejor el éxito que el coeficiente intelectual.
Mindfulness y meditación: Como siempre, la meditación y mindfulness nos dan el espacio para observar y la oportunidad de dejar de reaccionar inconscientemente en piloto automático y, en cambio, responder de acuerdo con nuestros valores.
Sal a la naturaleza: playa, bosque, montañas, estrellas en el cielo nocturno. Es una de las mejores maneras que conozco de percibir la inmensidad, el misterio y el milagro de nuestra propia existencia. Es difícil sentirte lleno de tu propia importancia cuando te enfrentas a los miles de millones de estrellas del cielo y a la inmensidad del espacio cósmico; o al claro cielo azul, al horizonte vacío y a las olas que rompen sin cesar. También es una sensación maravillosa saber que «soy parte de todo eso, y todo eso es parte de mí». La experiencia es paradójica, ya que me siento increíblemente pequeño, pero al mismo tiempo, la sensación de conexión con todo lo que veo también me hace sentir inmensamente amplio.
El agradecimiento: Para mí es muy natural que cuando experimento y contemplo la naturaleza me llene de un sentimiento tanto de asombro como de agradecimiento. El agradecimiento también me hace muy consciente de la conexión e interdependencia de todas las cosas. No me veo como una isla, sino como una parte de este maravilloso universo en constante cambio.
La compasión: La compasión nos permite salir de nuestro universo egocéntrico y comprender que mi lucha, mi historia, no es ni más ni más ni menos importante que las luchas y las historias de los demás. Es una de muchas. No todo gira en torno a mí.
Te animo a desarrollar una actitud de humildad. La humildad estuvo totalmente ausente en la primera mitad de mi vida; también fue la parte de mi vida con más sufrimiento. A medida que han pasado los años y he practicado mindfulness y la meditación, me he dado cuenta de que no sé nada o casi nada. La humanidad conoce un porcentaje muy pequeño de todo lo que hay que saber. La humildad me ha ayudado a aprender, a desarrollar la paciencia, a mejorar mis relaciones, a ser más amable, más compasivo. Todavía me queda un largo camino por recorrer y mucho por aprender. Me siento feliz y agradecido de seguir por este camino.
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