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El Alcohol – ¿En qué fase te encuentras?

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Geoffrey Molloy

Alcohol ¿En qué fase estás tú? ¿Ignorancia, negociación, aceptación o acción?

marzo 22, 2018

Alcohol independienteBoletines

11 comments

Las tres fases de la adicción al alcohol

No existe tal cosa como un “alcohólico” ni la enfermedad “alcoholismo”. Sin embargo, sí, hay muchos adictos al alcohol. El alcohol es una droga adictiva e igual que con cualquier otra droga, cualquier persona, con tiempo y dadas las circunstancias “adecuadas” se engancha. En la sociedad se acepta que cualquier persona que consume heroína es un adicto a la heroína y que cualquier persona que fuma es un adicto a la nicotina. No hablamos de “heroinómanos normales” y “heroinólicos”, ni de “fumadores normales” y “nicotinólicos”. No tendría sentido, ¿verdad? La división de consumidores del alcohol en “bebedores normales” y “alcohólicos” tampoco tiene sentido. Cualquier persona que consume alcohol de modo habitual es adicta. Sin la adicción al alcohol, la industria del alcohol simplemente no sería tan enorme ni rentable. Igual que la industria tabacalera, crear adictos forma parte del modelo de negocio. Sin embargo, existe una manera más útil de clasificar el consumo del alcohol, lo que concuerda también con la ciencia más reciente:

  1. Fase 1 – Ignorancia: Este estado de ignorancia se puede comparar con estar soñando. Todos empezamos así. Cuando éramos niños fuimos seducidos por el masivo lavado de cerebro. La idea es la siguiente: consumir alcohol es una diversión adulta nada dañina y que sólo una minoría de personas no normales y genéticamente predispuestas acaban convirtiéndose en alcohólicos.  ¡Bobadas! Esto no tiene sentido. Cuando empezamos en los principios verdaderamente parece divertido. Empezamos a beber durante la adolescencia.  Nos convence la mentira, el estado de sueño; lo creemos todo. Cerca de la mitad de  todos los consumidores del alcohol nunca salen de este estado de sueño, de esta categoría “ignorante”. Ni siquiera se les ocurrirá cuestionar su consumo de alcohol. Independientemente de lo que beben, la cantidad que beber o cuando beben, creen que lo que beben es “lo normal”. Una “subcategoría” dentro de este grupo son los  que se empeñan en permanecer ignorantes; se dan cuenta de que hay momentos cuando beben demasiado pero su miedo es más fuerte. Su actitud se puede describir adecuadamente  por el dicho “mal de muchos; consuelo de tontos”.
  1. Fase 2 – Negociación: Esta fase empieza cuando algo ocurre (p.ej, positivo en un control de alcolemia, algún disgusto, una incidencia con la pareja) que nos choca lo suficientemente para que nos demos cuenta de que nuestra relación con el alcohol no es tan benigna ni tan divertida como el lavado de cerebro nos hizo creer. Es como despertarnos de un sueño en que todo fue maravilloso y a medida que nos despertamos, nos damos cuenta de que el sueño, por maravilloso que fuese, fue esto tal cual – sólo un sueño. Éramos tan felices en nuestro sueño (nuestra ignorancia) que intentamos volver a él. Damos vueltas en la cama esperando poder volver al sueño. Cuando recibimos este primer choque que nos saca de nuestra ignorancia, nuestra primera reacción es intentar convencernos a nosotros mismos de que tenemos el control sobre nuestro consumo. (La alternativa… pensar que podríamos ser un “alcohólico” es simplemente demasiado horrible de contemplar.) Así que nos ponemos reglas como por ejemplo: “nunca bebo solo… nunca bebo antes de mediodía… nunca bebo algo más fuerte que la cerveza… sólo bebo los fines de semana.” Estamos intentando convencernos de que tenemos el control. La realidad es que estamos intentando recuperar el control. Cuanto más tiempo pasamos en esta fase, tanto más peligrosa se vuelve la situación ya que es más probable que nos obsesionemos sobre la situación. No nos atrevemos a compartir nuestros temores con otros, ya que no queremos llevar puesto el estigma de “la persona con un problema de alcohol” o del “alcohólico”. Esto nos da más tiempo para obsesionarnos y a medida que nos obsesionamos, es probable que empecemos a sentirnos deprimidos. Es probable además que durante este período, sigas aumentando el consumo. Nos volvemos cada vez más paralizados por un “tira y afloja” de miedo; miedo a seguir consumiendo alcohol: “está destrozando mi vida”, “me está matando”, “me cuesta una fortuna”, “es una esclavitud”. Y el temor a dejarlo: “pero ¿cómo podré relajarme?”, “¿cómo podré tranquilizarme cuando estoy estresado/a sin alcohol?”, “¿cómo voy a pasarlo bien?”, “¿qué pasará con mi vida social?”, “todos van a pensar: ¡pobrecito no sabe pasarlo bien!”. El temor más  grande de todos suele ser: “¡Tal vez nunca seré libre!”
  1. Fase 3 – Aceptación y Acción: Desafortunadamente debido al temor al estigma social – todo basado en una idea sobre el alcoholismo (una enfermedad que no existe ni siquiera) normalmente nos quedamos agarrados en la fase de la negociación demasiado tiempo. Finalmente – nos encontramos siempre en uno de estos tres estados: colocados, recuperándonos o ansiosos por la próxima copa. Desafortunadamente, muchos esperan demasiado tiempo y… demasiado tarde, sus vidas han sido devastadas – sus relaciones, su trabajo y su salud también. ¿Por qué ocurre esto?

 (a): Sufrimiento y nunca libres. La razón principal es que la mayoría de las terapias y programas se basan en un modelo defectuoso de entender las adicciones. Te dicen que estás enfermo/a, que no eres normal, que tienes una enfermedad incurable; que eres un víctima, sin poder; que necesitas medicación para ayudarte a dejarlo; que tienes que ir a reuniones todos los días; que tienes que ingresarte en un centro durante meses (que cuesta un dineral); que nunca podrás disfrutar de la vida como una persona “normal”. Si no estabas deprimido/a antes, es cierto que ahora sí, estás deprimido/a. También te dicen que tienes que evitar bares, de hecho, cualquier lugar que vende alcohol. El mensaje resumido es que el alcohol es OK, que eres tú el enfermo, nada normal; que el problema eres tú. Vives la vida desde la posición: “me gustaría beber alcohol pero no puedo porque no soy normal, estoy enfermo/a.” Peor que todo esto, es la baja efectividad de estos programas que acaban costando mucho. La situación parece no tener ninguna esperanza. 

(b): ¡La libertad! La alternativa es que sigas el camino que han seguido centenares de otras personas: una estancia de cuatro días en Cantabria con nosotros, no sólo para liberarte de la adicción al alcohol, sino también aprender una manera diferente de gestionar y relacionarte con tu vida: cambiar las estrategias, percepciones y manera de pensar que te mantenían atrapado, por una manera de relacionarte con tu vida que aumenta la paz en tu corazón y espacio en tu mente. Nuestro objetivo es que te escapes de tu adicción rápidamente, sin sufrir  y sin echarlo de menos. Que dejes de ser víctima y te vuelvas el héroe/heroína de tu propia narrativa; que vivas el resto de tu vida desde la posición: “Podría consumir alcohol si lo quisiera pero no quiero hacerlo”. La mayoría de las personas que se liberan con éxito con nosotros ya han probado prácticamente todo lo demás. No existe un programa más efectivo. No te perseguimos pero siempre estamos ahí para apoyarte.

Si te identificas en la fase de negociación, no pierdas tu tiempo. Contacta con nosotros, libérate, recupera el respeto en ti mismo y sigue con tu vida más sabio,  más fuerte y más feliz.

La persona que se despierta y luego da el paso, mientras que otros se quedan  paralizados en la ignorancia o el miedo, no es víctima; esa persona es un héroe o heroína.

Si has intentado dejarlo antes y luego no lo has conseguido no pierdas el ánimo. Contacta con nosotros sin compromiso. Si quieres aclarar cualquier cosa contacta conmigo:

geoffrey@esfacilsisabescomo.com

 

Comentarios de la comunidad

jose

El acoholico de verdad , el alcoholico problema que va a bares habla con extraños...busca amistad borracho....despues al dia siguiente, sufre siente miedo verguenza dolor emocional por lo que hizo bebido.... Ese tipo de alcoholismo es muy malo, se sufre mucho....

Edgard

El año pasado, por segundo intento, llevaba seis meses sin tomar cuando caí en una emboscada y bebí. No me di cuenta, era casi Navidad, el sol soltaba colores dorados sobre una tarde preciosa. Creí que había sido una recaída, solo ese día, pero tardé meses en volver a partir de la meta inicial. Ahora llevo casi cinco meses sin alcohol, estoy muy contento y motivado (como nunca antes),pero, aunque no me haga falta beber, tengo temor a que si caigo nuevamente, me cueste levantar mi entereza. No pienso en ello, solo no me gustaría que sucediera. Saludos

Mireya Ceballos

Hola Juli ¡Enhorabuena! Me alegro que has conseguido liberarte con el libro de Allen. Gracias por tus comentarios tan amables sobre nuestro trabajo. Seguimos aquí a tu disposición. Un saludo Cordial.

Geoffrey Molloy

Hola Ana Antes de nada ¡Enhorabuena! Por haberte liberada de la esclavitud del alcohol. Es maravillosa ¿no?. Gracias también por compartir tu experiencia con nosotros. Siempre me proporciona una alegría enorme cuando alguien, se despierta y se libera de la esclavitud del alcohol. Un saludo cordial

Geoffrey Molloy

Hola Iñigo Gracias por tu comentario. Me alegro que te sientes tan libre. Despertarnos a la realidad del alcohol realmente cuesta en nuestra sociedad, porque la mayoría de las personas empiezan a beber durante las adolescencia (cuando está ilegal – como el tabaco) y la mayoría de los adultos/as beben alcohol. Así que vivimos en una sociedad en la cual la mayoría de las personas adultos/as nunca han experimentado la vida adulto sin alcohol. Como tu, yo y muchos más han descubierto es realmente maravillosa. Un abrazo

Ana

Hace casi un año que leí tu libro, no he vuelto a beber y encima me ha resultado fácil!! No tengo ganas de volver a tomar una copa y salgo a menudo a comer fuera, bebo agua . Eres genial gracias🤗🤗

Iñigo

Geoffrey, es tan clara y coherente tu argumentación que yo que no tenía, según falsos baremos, dependencia ni era alcohólico, podría fácilmente ser víctima de esta adicción. Por tanto deje de tomar cualquier cosa con alcohol y también me encuentro libre, muy libre.

Juli

Hola Goffrey, soy un lector de "Es fácil controlar el consumo de alcohol", y no tengo necesidad de beber alcohol, para nada. Gracias por estar ahí, y junto con Rhea me alegra que sigáis en mi vida; a través de las redes, leo vuestros artículos en Facebook y me orientan, otros confirman lo q ya he leído y encuentro q seguir en contacto con vosotros es una inversión en sabiduría y bienestar. Por muchos años de seguir aprendiendo y contacto. Creo q no es solo bonito q haya cambiado de mi vida hábitos malos sino q quiera aprender; a través de la propia experiencia, de lo q publicáis y lo q aprendo analizando un poco las cosas, a ayudar a mis seres queridos y a quien se preste, en la medida de lo posible... a veces con estar y q sepa cómo piensas (lo q aprendo de todo lo relacionado con vosotros) es suficiente, si alguien quiere profundizar o intentaré ayudar o derivarlo a vosotros... un saludo Goffrey!!! Un millón de gracias!!!

Geoffrey Molloy

Si visitas el sitio web de la OMS, verás que no mencionan el alcoholismo ni a los alcohólicos como tal, sino que hablan del "síndrome de dependencia del alcohol". Hablan del uso dañino del alcohol. Tampoco es el término utilizado en ninguno de las ICD-10, ni tampoco en el DSM -V. El DSM-V (Manual Diagnóstico y estadístico de trastornos mentales) habla de “Alcohol Use Disorder”. Se considera que Alcoholismo/alcohólico son unos términos coloquiales con poca base científica. La teoría del “modelo de enfermedad de la adicción al alcohol”, es cada vez más rechazada. De hecho, en una encuesta reciente, la mayoría de los médicos y científicos que trabajan en este campo no lo consideran como enfermedad. ¿Cuántas enfermedades puedes identificar que puedan curarse mediante un cambio de percepción y una decisión? De hecho, en un estudio reciente se afirmó que los únicos beneficiarios del modelo de adicción son "la industría de la recuperación". Mi opinión basada en más de 22 años de experiencia es que es precisamente esta idea de que sea una enfermedad incurable lo que crea parte importante del problema. También quita la posibilidad de libertad y de curación. Sus afirmaciones en cuanto a la efectividad de los programas ya existentes no son respaldadas por Cochrane ni por NICE, que hizo un estudio extenso de todas las investigaciones basadas en pruebas de AA y otros programas que utilizan los "Doce Pasos" (más del 90% de los programas). Su conclusión fue que no existe ninguna evidencia que demuestra su efectividad. Si puedes indicarme alguna evidencia independiente que demuestra su eficacia, por favor, indícamelo; me interesaría mucho leerlo. Finalmente, felizmente confieso que me gano la vida enseñando a las personas a liberarse de la adicción y a aprender a redirigir sus vidas. Todo lo que enseño lo he experimentado de primera mano al igual que muchos de mis clientes. Cobro 725 euros por una terapia con que la persona se libera, es decir, no tiene por qué pasar el resto de su vida creyendo que tiene una enfermedad incurable. Además, cobramos otros 475 euros por un curso residencial de tres días para resetear su vida. Esto es también respaldado por ocho semanas de aprendizaje a distancia y apoyo abierto durante el tiempo que la persona lo necesite. Todo esto por un total de 1200 euros. Podía cobrar más pero quiero que sea asequible para más personas. Muchos de las personas que vienen a verme ya han gastado mucho dinero en centros de tratamiento - alguno hasta 40.000 mil euros. Un ejemplo típico: Cuando una persona primero busca tratamiento, él/ella paga entre 2.000 euros y 12.000 al mes para ingresarse. La mayoría de los centros recomiendan una estancia de 6 semanas. Luego, la persona para mantenerse libre tiene que contratar un servicio de ambulatorio indefinido de entre 300 y 600 euros al mes porque lo definen como una enfermedad incurable. No hay un final para esto; no hay ningún punto en que la persona se cure. Muchas personas en el momento en que vienen a verme ya han gastado más de 20.000 euros sin haber sido liberados. La mayoría de estas personas ahora sí, son libres. Yo considero que mi trabajo está hecho cuando la persona ya no me necesita. Sigo en contacto con muchos pero más en plan amistoso porque me da una alegría enorme ver como llevan sus vidas libres, sanas y con sentido. Finalmente en cuanto al "juego de palabras" quiero dejar muy claro que creo en cada palabra que he escrito. No digo nada con ligereza. En mi opinión hay personas pagando un dineral por programas poco eficaces que se mantienen a veces en abstinencia pero nunca libres. Para mí es importante que todo el mundo sepa que sí, puede ser libre.

Cesar

Totalmente de acuerdo con todo lo que he leído yo llevo muchos años viviendo y he tenido parones también he estado en algún centro y la verdad que por mucho que me han dicho que era un enfermo jamás me he considerado así

Sergio

El alcoholismo es una enfermedad reconocida por la OMS. Entiendo que lo suyo es un negocio, pero no haga juegos de palabras con algo tan perjudicial. De todas maneras no es necesario vilipendiar otros métodos de terapia para personas alcoholicas cuando son muy efectivas como se ha ido demostrando desde hace muchos años. Un saludo .

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